Qué bueno que el presidente electo se sume a la celebración del Orgullo. Qué divino que sea tan moderno que lo haga con un tuit. Qué regio que lo concluya con un #LoveIsLove. Pero, señor presidente, hoy su #LoveIsLove no es suficiente. Esa libertad para ser felices que refiere requiere primero que maricas, machonas y tracas podamos vivir, que sigamos vivas en un país en el que cada semana una de las nuestras muere asesinada única y exclusivamente por ser quien es, en un país en el que cada día dos de las nuestras mueren por causas asociadas al sida en tiempos en los que existen las tecnologías médicas suficientes para prevenirlo y detenerlo, en un país en el que todos los años adolescentas de las nuestras se suicidan por el rechazo de sus familias, de sus escuelas, de la sociedad toda.

Señor presidente, hoy su #LoveIsLove no es suficiente, porque frente a la realidad de muertes que maricas, machonas y tracas (sobre)vivimos en este país, reduce nuestros problemas y necesidades al reconocimiento del amor. Y qué digo del amor, simplemente de la unión civil, porque ni se atreve a llegar al matrimonio. Y qué unión civil, además, porque ya en campaña varias veces ha dicho que se refiere a la patrimonial. A la patrimonial, como aquella que proponía Martha Chávez para bloquear la que redactamos con Carlos Bruce. Patrimonial como si nuestras uniones se trataran de un simple contrato, de una sociedad comercial en la que la principal preocupación es cómo se protege la casa, el carro y demás. Y, claro, para algunos gais y lesbianas con el dinero suficiente para comprarlos es una gran preocupación protegerlos. Pero para las que no tenemos dónde caernos muertas, ¡ay!, cómo le explico... La unión civil nos importa tres pepinos.

Señor presidente, hoy su #LoveIsLove no es suficiente, porque debe -como le decían hace algunas semanas sus entrevistadores de El Comercio- inspirar a los peruanos rumbo a un país en el que todas y todos podamos ser felices, y para ello tiene obligaciones muy muy concretas. Pero usted dijo que estaba dispuesto si y solo si "el Congreso me aprueba mis proyectitos de agua, educación y salud, que es lo más importante. Si hacen eso, apoyo esto". También dijo que "Bruce y otros tendrán que aglutinar la bancada", que "no me voy a aventar a una piscina vacía". ¿Y sabe qué? Estoy lleno de rabia, porque votamos por usted para defender la democracia, y la democracia implica la defensa irrestricta de los derechos humanos, de los derechos humanos de absolutamente todos los seres humanos, y eso implica también los derechos humanos de maricas, machonas y tracas, implica aventarse a la piscina vacía sin estar poniendo condiciones, sin venirnos con el cuento de que hay problemas más graves. Porque claro que me indigna que cada año 3,600 niños peruanos mueran por beber agua contaminada, pero no lo imagino a usted diciéndole a los indígenas, a las mujeres o a los negros que se esperen hasta que todos tengan agua, ¿y por qué los maricones tendríamos que esperar?, ¿por qué somos nosotros a los que tiene que negociar por sus "proyectitos"?

¿Y sabe qué, señor presidente? No me trago su tuit buena onda con el rollito de #LoveIsLove porque durante la primera vuelta usted se reunió con los principales lobistas contra no solo la unión civil, sino la vida de maricas, machonas y tracas. Y lo hizo de motu propio. Nadie se lo pidió. Solitito fue. Y a ellos que bloquearon la unión civil, y que antes lograron la impunidad para los asesinos de homosexuales censurando nuestra propuesta contra los crímenes de odio, y que ahora intentan eliminar toda protección antidiscriminatoria para nosotros en el Nuevo Código Penal, a ellos usted les dijo que a Bruce lo quería ahí "para las cosas del techo y no para las cosas del lecho". Así que no se me venga a hacer el moderno, el inclusivo. A otro perro con ese hueso.

Si realmente es moderno e inclusivo, en su primer mensaje a la Nación pida perdón histórico a todas y cada una de las personas LTGBI por la discriminación, violencia y odio que han impactado en nuestras vidas, disponga que inmediatamente se nos restituya en el Plan Nacional de Derechos Humanos y en el Plan Nacional de Educación en Derechos y Deberes Fundamentales de los que este gobierno nos borró, anuncie que se formará una Comisión de la Verdad sobre nuestros derechos que desarrollará recomendaciones vinculantes para empezar a reparar inmediatamente las graves violaciones a nuestros derechos humanos. Y ordene a todos y cada uno de sus ministros tomar inmediatamente medidas concretas que reconozcan y garanticen nuestra condición humana. ¿No se le ocurre nada más allá de la unión civil? No se preocupe. Le avanzo la tarea.

El Ministerio de Educación debe implementar inmediatamente la educación sexual integral desde una perspectiva científica y laica, así como programas integrales de prevención y acción frente al bullying homofóbico que impliquen también la sensibilización de madres y padres. Y, de paso, debe eliminar los cursos de religión católica de las escuelas públicas. La base para la legitimación de los discursos de odio no puede ni debe ser impuesta con nuestros impuestos.

El Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables debe dar asistencia integral a las víctimas de la homo/lesbo/transfobia. Especialmente a las y los adolescentes expulsadas de sus hogares o que huyen de éstos por el violento rechazo a quienes son.

El Ministerio del Interior debe capacitar a los policías en el reconocimiento y defensa de los derechos humanos de las personas LTGB, para que dejen de ser uno de los principales violadores de nuestros derechos, cumplan su deber de protegernos e investiguen minuciosamente todas y cada una de los abusos que vivimos, para que por fin sean posteriormente sancionados.

El Ministerio de Salud debe declarar en emergencia su programa de prevención, diagnóstico y atención en VIH, e inmediatamente desarrollar un plan que multiplique rápidamente las coberturas de atención siguiendo las recomendaciones internacionales de ONUSIDA y e implementando todas las tecnologías médicas disponibles y que han demostrado ser costo-efectivas. También debe desarrollar protocolos de atención integral que involucren la salud mental frente a la violencia, la salud ginecológica de las lesbianas y el proceso de transición de género de las personas trans.

El Ministerio de Relaciones Exteriores debe dejar de abstenerse frente a toda iniciativa de reconocimiento de nuestros derechos en instancias internacionales como la OEA y la ONU, debe dejar de mentir frente a la CIDH sobre cómo el Estado peruano ha violado sistemáticamente nuestros derechos, debe convertirse en un promotor activo de nuestros derechos.

El Ministerio de Economía y Finanzas debe garantizar el presupuesto para todas estas acciones. Y, de paso, ya que hablamos de dinero, debería asignar los recursos suficientes a la Defensoría del Pueblo para la creación de una adjuntía especializada en nuestros derechos.

Para todas estas cosas que, como ya se habrá dado cuenta, van muchísimo más allá del #LoveIsLove, no necesita del Congreso ni de los 73 fujimoristas que seguramente bloquearán la unión civil y cualquier otra iniciativa de Carlos Bruce, Alberto de Belaunde y tantos otros promuevan. No, para todo esto y más no necesita del Congreso, únicamente necesitamos su voluntad política, su liderazgo, su orden. ¿Está dispuesto o solamente se quedará en su lindo hashtag?

Lima, 3 de julio de 2016

ACTUALIZACIÓN 04.07.2016: ¿Qué decían del histórico tuit de PPK, de que éste era un primer gran paso, que no sea tan malagradecida exigiéndole cosas, disculpas, de que él que culpa tiene de la homofobia? A ver, pues. En todo caso, mucho love para su CM. Respecto al presidente electo, me reafirmo en todas y cada una de mis palabras. Así que guárdense su esperanza. Sobre derechos LTGBI, se viene un gobierno conservador más. Ah, y si no lo habían notado, no está de acuerdo con la #UniónCivilYa que proponíamos con Carlos Bruce, sino con una únicamente patrimonial, o sea con la que proponía Martha Chávez. Repito, ¿qué decían?